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U-space, el aire en el que nos desplazaremos

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Antonio Rodríguez-Laiz

AERTEC / Marketing & Communication

Los vehículos aéreos, tripulados o no, constituyen un sector en pleno crecimiento en todo el mundo. Forman parte de un escenario que, precisamente ahora, se está configurando para que llegue a ser en breve una parte cotidiana de nuestra sociedad. Hablamos del desarrollo de la movilidad aérea avanzada y su convivencia con el tráfico aéreo que conocemos actualmente.

Una de las garantías para que la Movilidad Aérea Avanzada, AAM, sea un éxito es disponer de un marco común de integración normativa y tecnológica, como es U-space.

No solamente pequeños drones, sino UAS de mayor tamaño y VTOLs brindarán servicios en todos los entornos, incluidas las áreas urbanas y periurbanas. Vigilancia, inspecciones de infraestructura, agricultura de precisión, entrega de paquetería, servicios de emergencia o transporte de personas son solo algunos de los servicios que convivirán en un espacio hasta ahora vetado a todos ellos. Es inconcebible pensar que todos esos vehículos aéreos pudieran sobrevolar nuestras ciudades libremente, sin un marco normativo y de servicios comunes que prevea un desarrollo ordenado, seguro y eficiente de las operaciones. 

Si tuviésemos que definir U-space en una sola frase, se podría decir que se trata de un entorno de regulación, ordenación y operación en el que se integrarán todo tipo de aeronaves para que puedan coexistir y cooperar con seguridad dentro de la totalidad de nuestro espacio aéreo, especialmente los entornos urbanos.

El principal objetivo de U-space es disponer de un marco de regulación para el tráfico aéreo, tomando en consideración no solo los vuelos realizados con aeronaves tripuladas, sino también las realizadas con UAS/drones en las distintas categorías.

En definitiva, hablamos de un conjunto de nuevos servicios basados en un alto nivel de digitalización y automatización de funciones y procedimientos específicos, tanto en el desempeño de los propios vehículos aéreos, como en su coexistencia y el control en tierra. Estos servicios estarán diseñados para respaldar el acceso seguro, eficiente y protegido al espacio aéreo para un gran número de vehículos aéreos de diferentes categorías. En este sentido, U-space es un marco diseñado para facilitar todo tipo de misiones, en diferentes clases de espacio aéreo y entornos, bajo unos parámetros de control del tráfico aéreo que garanticen su operación y seguridad, tanto de los propios vehículos, como de los bienes y personas del entorno donde lleven a cabo su operación. 

Para conseguirlo, se ha propuesto toda una estructura espacial regulada con la que se prevé gestionar las operaciones en el espacio aéreo, creando además espacios segregados con diferentes niveles de seguridad específicos en función del riesgo que pueda suponer la operación llevada a cabo con aeronaves, ya sean tripuladas o no (seguridad de las personas, protección del medio, riesgos para la salud, etc.).

Este entorno estará encargado de regular diversas acciones de las operaciones de las aeronaves, así como de proporcionar servicios a los pilotos o supervisores para que puedan tener una experiencia de vuelo segura. Desde esta perspectiva, U-space también es una herramienta digital que integra tanto a los proveedores de servicios aéreos, como a las autoridades locales y las fuerzas de seguridad.

Como añadido, la creación de un marco claro a nivel de la Unión Europea permitirá la creación y empuje de un mercado más dinámico y con las reglas de juego muy claras. Las consecuencias más directas de esto serán el desarrollo ordenado de un nuevo sector económico y la creación de nuevos empleos.

U-space es el nombre que la Unión Europea le ha dado a ese proyecto de integración en una plataforma unificada de los sistemas aéreos no tripulados (UAS, drones, VTOL…) con las demás aeronaves que comparten el espacio aéreo. Ese espacio estará regulado por las autoridades locales para gestionar el tráfico aéreo de una forma sencilla y segura.

¿Y cómo nació U-space? La Empresa Conjunta SESAR (SESAR Joint Undertaking) es una asociación europea institucionalizada entre socios de los sectores público y privado que se sirve de la investigación y la innovación para facilitar la concreción y materialización del cielo europeo digital. En esta línea, SESAR redactó en 2017 un plan que permitiese que U-space fuera operativamente posible. 

Para una perfecta evolución hacia el escenario ideal que plantea el concepto U-Space, se han previsto cuatro fases progresivas, durante los próximos diez años, para aplicar la automatización de procesos. La implantación de las diferentes fases está asociada a la disponibilidad de servicios y tecnologías. Los servicios irán evolucionando, tanto como el nivel de automatización de los drones.

La fase U1 se puede decir que es en la que estamos inmersos desde 2017 e incluye la puesta en funcionamiento de los servicios más básicos de la plataforma, como pueden ser:

  • Sistema de registro e identificación electrónica de pilotos (y supervisores) y aeronaves.
  • Suministro de información básica de pilotos y aeronaves registradas.
  • Suministro de datos de vuelo para operadores y pilotos de drones (zonas de vuelo…).
  • Geofencing, que es la determinación del perímetro geoespacial alrededor de una zona o área que delimita su autorización de acceso.
  • Habilitación de nuevos tipos de operaciones y ampliación del alcance de las operaciones VLOS (Visual Line of Sight) o la apertura de limitaciones de los vuelos BVLOS (Beyond Visual Line of Sight).

La fase U2 se prevé que se inicie a lo largo de 2023, e incluye una serie de servicios que serán de gran utilidad para respaldar a los pilotos. La paulatina digitalización de los procedimientos permitirá, así mismo, un incremento en la densidad de las operaciones. Entre los servicios que se habilitarán en esta fase están:

  • Sistema de geofences de efecto inmediato (tácticas).
  • Sistema de planificación digital de vuelos.
  • Rastreo de aeronaves y vuelos.
  • Sistema de solicitud y aprobación de permisos para operaciones concretas.
  • Información del tráfico aéreo.
  • Información meteorológica.
  • Gestión de situaciones de emergencia.
  • Información de emergencias en tiempo real.
  • Gestión de conflictos aéreos.
  • Soporte para la incursión dentro del espacio aéreo controlado.
  • Monitorización del espacio aéreo.

La fase U3 de la aplicación de la regulación U-Space contempla la implementación de servicios más complejos y avanzados que ayuden a la optimización del tráfico aéreo de forma automatizada. Se trata de facilitar nuevas y mejoradas operaciones en áreas de mayor densidad de población o que conlleven una mayor dificultad en los procedimientos. Los servicios previstos para esta fase serán:

  • Geofencing dinámico.
  • Sistema de detección y evasión de obstáculos.
  • Automatización de acciones de evasión.
  • Gestión dinámica de la capacidad.
  • Gestión automatizada de conflictos aéreos.
  • Comunicación activa con los entes reguladores del espacio aéreo.
  • Interfaz colaborativa con el ATC.

 

La fase U4 será la última de la puesta en marcha del sistema de regulación U-Space y está prevista para 2030. En ella se culminará el proceso de integración de todos los servicios ofrecidos en las fases previas, avanzando en su completa automatización, conectividad y digitalización. Habrá servicios adicionales que se culminarán en esta fase:

  • Interconexión automática entre todas las aeronaves que circulen por el espacio aéreo.
  • Integración de pilotos y supervisores de vuelo con los gestores y autoridades reguladoras a través de canales digitales.
  • Interfaces integradas con el ATM/ATC y la aviación tripulada.
  • Interacción completa de VFR y UAS/drones.

Pero, ¿Qué servicios aportará U-space?

U-space englobará servicios tales como el suministro de información, el apoyo en la planificación de vuelos o el seguimiento de aeronaves, entre otros. Incluso irán surgiendo nuevos servicios a medida que vaya madurando el concepto.

Para la provisión de los servicios surgen nuevos tipos de proveedores, llamados CISP y USSP, que se integrarán con el actual sistema de gestión del tráfico aéreo, ATM.

Los Proveedores de Servicios Comunes de Información o CISP tienen como objetivo principal de su actividad la difusión de datos estáticos y dinámicos que puedan servir de base para la prestación de servicios en lo relativo a la gestión del tráfico de aeronaves no tripuladas. Son la fuente única y confiable de toda la información común en los espacios aéreos U-space bajo su responsabilidad. Para cada espacio aéreo U-space solamente podrá haber un CISP certificado.

La prestación de servicios dentro del U-space en todas las fases de operación estará gestionada por los USSP (U-Space Services provider) certificados, pudiendo haber varios proveedores en cada volumen de U-space. Se deberán coordinar con el resto de los proveedores de servicio, tanto del propio U-Space como del espacio aéreo.

Entrando en los servicios que se prestarán, hay varios que son obligatorios para cualquier operación en el U-space y que, por tanto, deben estar disponibles en todos los casos. Son los siguientes:

Servicio de identificación de red, mediante el cual los gestores del espacio aéreo podrán identificar a cualquier aeronave a lo largo de toda la duración del vuelo y vincularla a la información almacenada en el registro.

Servicio de geoconsciencia, orientado a disponer de información relativa a las condiciones operacionales, las zonas geográficas pertinentes para el vuelo, las eventuales limitaciones del espacio aéreo que le sean aplicables a cada aeronave y las restricciones existentes (estáticas o dinámicas).

Servicio de autorizaciones, que facilitará a los operadores el permiso (si es aplicable) para cada vuelo individual, fijando sus términos y condiciones.

Servicio de información sobre el tráfico aéreo, que permitirá conocer cualquier otro tráfico cercano a la posición o de la ruta de vuelo prevista de la aeronave.

Aparte de estos servicios, que se consideran obligatorios, hay otros que son opcionales, tales como:

Servicio de información meteorológica, proporcionada por fuentes de confianza y a diversas escalas (climática, regional y local), que servirá, tanto en lo relativo a la información en tiempo real como a las previsiones, para mantener la seguridad y apoyar las decisiones operativas de otros servicios.

Servicio de supervisión de la conformidad, que permitirá a los operadores verificar si cumplen los requisitos establecidos y los términos de la autorización de vuelo de UAS.

Además de estos servicios, habrá otros que se irán sumando en cada espacio aéreo en función de su disponibilidad y capacidad.

Desde la perspectiva actual, y especialmente si no se está familiarizado con la evolución de la tecnología, la normativa o las innovaciones en el ámbito de la movilidad aérea avanzada, todo esto puede parecer irreal. Lo cierto es que ya se ha avanzado mucho (estamos finalizando la fase U1 sin un exceso de demora) y en breve ya podremos disponer de un marco de integración para aeronaves en los espacios aéreos urbanos y periurbanos.

En Europa, donde la normativa, las comisiones de trabajo y los acuerdos entre países suelen ir muy lentos, exasperadamente lentos, el desarrollo del concepto U-space es un ejemplo muy positivo y, desde luego, prometedor.

 

U-space

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