La pasión por volar ha sido una constante en la historia de la humanidad. En algunos de los escritos más antiguos ya se mencionaba este hecho, que siempre estuvo limitado en su práctica porque ni el conocimiento ni la técnica permitían llevar a cabo algo tan ajeno a las aptitudes naturales del ser humano.
Ese anhelo por volar ha llegado, aunque evolucionado, hasta nuestros días. Viajar en avión sigue teniendo un atractivo especial, hasta tal punto que la última moda que ha surgido es la de los “vuelos a ninguna parte”, trayectos de una o dos horas en las que el origen y el destino son el mismo y tan solo se disfruta del vuelo.
Los primeros aeronáuticos ayudaron entre todos a configurar la aviación de la que disfrutamos hoy en día. Cada pequeño paso supuso un esfuerzo enorme en su época.
Para llegar hasta aquí el camino no ha sido corto ni sencillo. Existe constancia de que hace ya casi tres mil años, en China, se elevaron en el cielo varias personas mediante el uso de cometas. Las primeras pruebas las hicieron con prisioneros, por si aquello salía mal, pero tras comprobar su factibilidad, se hizo uso de esta técnica para fines militares de observación.
Se puede decir que la primera persona que realmente estudió las posibles técnicas para volar, y que las puso en práctica, fue Abbas Ibn Firnás, un andalusí que en el siglo IX se lanzó en un paracaídas rudimentario desde la torre de la mezquita de Córdoba y unos años más tarde voló durante varios minutos con un planeador de madera, tela y plumas de ave. Sobrevivió a ambos hechos y lo hizo ni más ni menos que mil años antes que los hermanos Wright se elevaran del suelo con su Flyer I.
Desde aquel momento han sido muchos los pioneros que han teorizado y llevado a la práctica las técnicas del vuelo, unos con más éxito que otros. Pero en la mayoría de los casos fueron incorporando pequeños avances que, en su conjunto, nos han llevado hasta el momento actual, en el que la aeronáutica es una de las industrias más avanzadas y complejas.
En esta infografía repasamos a algunos de esos pioneros que hasta recién entrado el siglo XX exhibieron creatividad, empeño y arrojo para cumplir el sueño de volar. Cada uno de ellos aportó alguna innovación que propició el avance de la aeronáutica. Entre todos ellos configuraron la técnica de la aviación, de la que disfrutamos hoy en día y de la que dependen tantas otras actividades cotidianas. En realidad, el mundo actual, tal y como lo conocemos, no sería viable sin la aviación.
