Carlos Antúnez es ingeniero de ensayos en vuelo del A400M y C295 de Airbus y trabaja actualmente en la planta que tiene esta compañía en San Pablo Sur, Sevilla (España). Se tituló como ingeniero aeroespacial entre Madrid y Missouri por la Saint Louis University en el año 2000. A continuación, cursó los estudios para obtener el título de Piloto de Transporte de Línea Aérea (PTLA), poco antes de iniciar su carrera profesional en AERTEC, allá por 2004, prácticamente en los inicios de esta compañía de tecnología aeroespacial en Sevilla.
Estuvo cuatro años trabajando duro en el Center of Competence de GST (Ground System Tests) para productos propios: C212, C235 y C295, junto al actual director de la división de Sistemas Aeroespaciales de AERTEC, Pedro Becerra, cuando la compañía realizaba pruebas funcionales de sistemas en estas aeronaves, e iniciando los primeros contactos con pruebas para el diseño del A400M, por aquel entonces, a punto de nacer. Posteriormente, se incorporó a Airbus en el mismo departamento, donde desarrolló su labor a lo largo de siete años más.
En 2015 ingresó en EPNER Flight Test School, cerca de Marsella, para cursar los estudios de Flight Test Engineer, su puesto actual.
Este piloto malagueño cuenta con una dilatada experiencia en el sector aeronáutico de casi 20 años y conoce en profundidad las diferentes aeronaves con las que ha trabajado. Sin duda, de todas ellas, la más avanzada tecnológicamente es el A400M. Esta aeronave está plagada de sistemas, sensores y avances tecnológicos que Carlos ha tratado muy de cerca.
Según cuenta, uno de los aspectos que más impresionan cuando se accede a la cabina de un A400M es una más que evidente digitalización de los controles y paneles de información existentes, monitores, switches, etc.
El HUD es un sistema que facilita el acceso a la información de vuelo y mejora la consciencia situacional del piloto, incrementando la eficiencia y seguridad de las misiones.
Pero si hay algo que sorprende especialmente, es el HUD (Head-Up Display), que aporta una imagen muy futurista de la cabina. Se trata de una pantalla interactiva transparente delante de la vista de los pilotos donde se muestran datos de navegación e información de vuelo (modo de vuelo, altitud, velocidad vertical, velocidad del aire, rumbo, señales de referencia, etc.), todo ello superpuesto a la visión real del mundo exterior. Es un equipo más que interesante perteneciente al sistema ATA31, que brinda a los pilotos mayor conciencia situacional en condiciones de baja visibilidad o en condiciones especiales donde se precise de una visión particular, como para despegar o aterrizar en pistas no preparadas, reabastecimiento en vuelo, vuelo a bajo nivel u operaciones con paracaidistas. En el caso del A400M hay dos HUD, que son empleados por piloto y copiloto.
El nombre de este sistema proviene del hecho de que el piloto o usuario puede visualizar la información sobre la pantalla con la cabeza erguida (head-up) y mirando al frente, sin necesidad de mover la cabeza para revisar los instrumentos.
El HUD del A400M puede proveer a los pilotos de información de otros sistemas, gracias a su interfaz con los sistemas FCGS (Flight Control and Guiadance System), FMS (Flight Navigation System) y EVS (Enhanced Vision System), entre algunos otros.
La complejidad de estos equipos unido a la cantidad de sistemas y subsistemas en una aeronave como el A400M hacen que sea necesario un mínimo de 2 pilotos, con una exigente preparación, para su manejo. La valiosa formación y experiencia de Carlos Antúnez nos dan una idea del amplio campo de conocimiento teórico, técnico y práctico que supone su desarrollo laboral a diario, del que es muy consciente y se siente afortunado.
Según nos cuenta Carlos, el primer sistema HUD real se utilizó en 1942 en un De Havilland DH.98 Mosquito de la RAF. En aquella ocasión tan solo mostraba el radar de información y un horizonte artificial. Posteriormente se fueron incorporando indicadores de velocidad aerodinámica, altitud, rumbo, viraje/alabeo y deslizamiento/derrape y otras informaciones de interés para el control de la aeronave, su carga útil y consciencia del entorno. Ya en los años 70, esta tecnología se incorporó a la aviación comercial.
Existen dos tipos de HUD, el más común es el fijo, que obliga al piloto a mirar a través de la pantalla anclada al fuselaje. El sistema determina la información que debe representar en cada momento en función de la posición y orientación de la aeronave. El otro tipo de HUD es el HDM (helmet-mounted display), montado en el propio casco del piloto y cuya principal virtud es que la información se mueve siguiendo los movimientos de la cabeza. En este caso, la información se presenta en función de la posición y orientación de la nave, así como la orientación (en tres ejes) de la línea de visión del usuario.
En opinión de Carlos Antúnez, la gran virtud de este tipo de dispositivos es que aportan una adecuada información situacional al piloto, que accede a los datos de forma más accesible, intuitiva y eficiente, lo que facilita su labor e incrementa significativamente la seguridad.
Nuestro interesante protagonista guarda un especial recuerdo de su paso por AERTEC y conserva en la memoria muchos grandes momentos vividos junto a sus compañeros durante aquellos años. Desde aquí, agradecerle inmensamente a Carlos sus facilidades para posibilitar la redacción de este artículo y acercarnos un poquito a su mundo.