En estos mismos instantes cientos de vuelos de carga están sobrevolando el cielo en algún lugar del planeta. Cada noche, los aeropuertos reciben millones de paquetes bien entrada la tarde. Sistemas informáticos los escanean, organizan, recogen y sueltan en cintas transportadoras de diferentes niveles y direcciones. Al final del recorrido, los depositan en contenedores de carga que luego serán subidos a aviones listos para partir. Mucho antes de que amanezca, ya habrán despegado.
Se espera que el transporte de mercancías se duplicará en los próximos veinte años.
La IATA estima que «el valor total de los bienes transportados por vía aérea representa el 35% del comercio mundial«. Según Boeing, «se espera que el transporte de mercancías llegue a más del doble en los próximos 20 años«.
Algunos administradores sin experiencia sienten que se están perdiendo algo. La carga aérea podría mejorar las cuentas de su aeropuerto. Algunos lo logran, pero por regla general, el transporte de carga aéreo no es algo tan sencillo como parece. De hecho, sigue siendo uno de los negocios peor entendidos del sector.
La carga aérea implica grandes inversiones: almacenes, muelles de descarga, áreas de aparcamiento, calles de acceso, complejos sistemas automatizados de cintas transportadoras… Los productos perecederos incrementan los costes aún más con congeladores, neveras, fitosanitarios… Por si fuera poco, cierta carga requiere instalaciones y procedimientos de control aduanero.
El transporte de carga aérea de larga distancia representa más del 80% del sector. Esto es así debido a que el transporte terrestre es bastante competitivo. Muy poca carga de corta distancia, como la paquetería urgente, puede competir en este sector. Por otra parte, las aerolíneas de bajo coste no quieren saber nada del transporte de mercancías.
Por último, la carga aérea debe estar equilibrada direccionalmente. Los comerciantes pueden llenar la bodega con productos en un sentido, pero encontrar que no hay productos para transportar en el vuelo de vuelta. Los operadores de carga aérea deben llenar la bodega disponible en ambos sentidos para que la ruta sea rentable.
El transporte de carga área es un negocio bastante complejo. Como resultado, el transporte de carga aérea internacional está concentrado en muy pocos hubs agrupados en las zonas principales de la actividad económica del mundo. Su aeropuerto, ¿podría ser uno de ellos?
Los operadores de carga aérea no buscan necesariamente aeropuertos que gestionen un gran número de pasajeros. Es más importante tener una ubicación geográfica estratégica y buenas condiciones climatológicas. Además, no tienen por qué buscar una ciudad grande en las cercanías. Las áreas metropolitanas medianas son más atractivas. Suelen ofrecer buenos servicios de transporte terrestre con atascos relativamente menores. Por último, el operador debe ser capaz de desarrollar su labor en las pistas las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Por lo tanto, es clave que no haya restricciones en los vuelos nocturnos, ni siquiera para la reducción de ruidos.
Si su aeropuerto cumple con estos requisitos, puede que tenga una oportunidad. Ahora sólo debe preparar bien su plan de marketing, meterlo en su maletín, subirse a un avión y recorrerse el mundo varias veces. ¡Buena suerte!