El día en que comencé a trabajar en AERTEC estaba muy emocionada. Había estado investigando la empresa cuando solicité el puesto y me había gustado mucho, luego en la entrevista se afianzó esa primera impesión. Aunque no soy nada tímida, estaba algo nerviosa antes de conocer a los demás compañeros, porque no sabía cómo iban a ser, ni el rango de edad que tenían, ni nada.
Pero al llegar todo fue genial, eran un grupo estupendo y muy acogedor y me sentí a gusto enseguida. Además, como esperaba, cuando empecé con los proyectos me encantaron. Me adapté rápidamente y a día de hoy estoy orgullosa de ser un miembro valioso de mi equipo.